Durante los treinta años desde que voló por primera vez el V-22 Osprey, el avión tiltrotor, construido por Bell Helicopter y Boeing, ha cambiado fundamentalmente la forma en que el Cuerpo de Marines y la Fuerza Aérea de EEUU operan en combate y apoyan las operaciones humanitarias. El V-22 se ha convertido en uno de los aviones más demandados y confiables en el servicio militar con su maniobrabilidad vertical única combinada con la velocidad, alcance y eficiencia de combustible de un avión de ala fija.

Hasta ahora, más de 375 aviones V-22 han acumulado más de 450,000 horas de vuelo en un espectro de misiones. Pronto, la Marina de los Estados Unidos comenzará a usar una nueva variante V-22 para entregar personal y carga a sus portaaviones, convirtiéndose en el operador más reciente que aprovecha las capacidades únicas de la aeronave.

"En los últimos 30 años, el V-22 ha reformado la proyección de potencia, el apoyo de asalto y el puente aéreo de operaciones especiales", dijo el Coronel del Cuerpo de Marina de los Estados Unidos, Matthew Kelly, gerente del Programa Conjunto V-22. “Desde ese primer vuelo en Arlington, Texas, el V-22 ha demostrado su valía en los campos de batalla de Irak, Afganistán, Siria y en todo el mundo. Treinta años después, ahora una plataforma en red, aún con una velocidad inigualable y alcance en el espacio de batalla, el V-22 continúa permitiendo la proyección de poder global y la respuesta a una crisis mundial en una escala nunca antes posible. Los Servicios de EE. UU. Y nuestros aliados esperan con interés los próximos 30 años de los V-22 dominando el campo de batalla".

El V-22 se ha desplegado en operaciones en Afganistán, Irak y Kuwait, y ha participado en operaciones humanitarias, incluido el alivio de terremotos en Haití y Japón y la respuesta a huracanes en los Estados Unidos. Los líderes militares continúan encontrando nuevos usos para el V-22. Las misiones que realiza incluyen el comando y control aerotransportado, la logística de la flota aerotransportada, la búsqueda de combate y el rescate y el apoyo de operaciones especiales, entre otros.

"El Osprey continúa demostrando que la tecnología del motor tiene muchos beneficios para los operadores que enfrentan los entornos más difíciles", dijo Chris Gehler, vicepresidente del Programa Bell V-22 y director adjunto del programa, Bell Boeing V-22. “El V-22 habilita las operaciones de una manera que antes no era posible. La alta demanda de Ospreys es una señal de que el avión es esencial para los clientes de todo el mundo".

El diseño exclusivo del motor del V-22 significa que el avión despega y aterriza como un helicóptero y vuela como un avión propulsado por hélice. Estas características ofrecen la flexibilidad táctica para desplegar con una huella logística más pequeña y sin una pista para acceder a áreas que no son accesibles con ningún otro avión. Las principales ubicaciones de producción son Filadelfia y Amarillo, con Rolls-Royce produciendo los dos motores de la aeronave en sus instalaciones de Indianápolis. El equipo de la industria del V-22 no solo está produciendo nuevos aviones, sino que también está trabajando con la Infantería de Marina para reducir la cantidad de configuraciones de los aviones y simplificar los diseños para mejorar la preparación para el inventario activo del V-22.

Bell Helicopter, una subsidiaria de propiedad total de Textron Inc., es un productor líder en la industria de aeronaves comerciales y militares, tripulados y no tripulados de elevación vertical y el pionero de los revolucionarios aviones tiltrotor. Globalmente reconocida por su servicio al cliente de clase mundial, su innovación y calidad superior, la fuerza de trabajo mundial de Bell sirve a los clientes que vuelan Bell en más de 120 países.